Conclusiones

Concluyo este informe profundamente satisfecha con los esfuerzos y logros por parte de la comunidad universitaria en Iztacala y, sobre todo, muy consciente de los retos y áreas de oportunidad que aún tenemos y que afrontaremos en este último año de mi administración.

Me siento honrada de continuar compartiendo trinchera con profesionales comprometidos con los objetivos que tenemos como institución y que procuran y priorizan la salud y el desarrollo de nuestra comunidad y de la sociedad en general.

A pesar de las vicisitudes propias de la época, celebro la actitud proactiva y propositiva que hemos manifestado ante el reencuentro social que estamos viviendo y nos han hecho ver nuestras diferencias, mismas que hemos sabido resolver con base en el diálogo, el respeto y la empatía.

En la FES Iztacala la ciencia es una tradición y el conocimiento, un compromiso; por lo que quiero dar las gracias a quienes, desde cada unidad de investigación y laboratorio, refrendan su vocación con la calidad en el trabajo, sobre todo a los jóvenes, quienes empujan generacionalmente con nuevas ideas, perspectivas y estructuras, tan necesarias actualmente.

Hemos vuelto a las brigadas y a la atención en clínicas y a pesar de la situación alarmante en cuestiones de seguridad a nivel nacional, nuestro campus y clínicas son espacios seguros.

Agradezco al equipo de vigilancia por su labor constante y a todas y todos los trabajadores administrativos en los que descansan los procesos y cuidados de nuestra Facultad; reconozco la disposición y apoyo de las autoridades municipales de Cuautitlán, Ecatepec, Naucalpan, de la Ciudad de México y, sobre todo, del municipio de Tlalnepantla, por el trabajo colaborativo en beneficio de nuestra comunidad.

Reitero que este informe de actividades, resume de manera injusta la labor de un gran equipo de personas trabajadoras, nobles y creativas; y la constancia y esfuerzo por adaptarse a una nueva realidad por parte de las y los jóvenes; del empeño y vocación de las y los docentes que recibieron nuevamente a sus alumnos, enfrentándose a una nueva generación, con todo lo que ello implica.

Reconozco a mis compañeros de trabajo, a las y los funcionarios que dieron continuidad a los trámites y servicios, y a quienes les agradezco su compañía, asesoría y apoyo en todo momento.

El presente de nuestra Facultad en nuestra Universidad es bueno y nuestro futuro promisorio; quienes pertenecemos a la FES Iztacala debemos sentirnos satisfechos por todo lo que construimos, así como profundamente comprometidos con el desarrollo de nuestra institución, como parte de la Universidad Nacional y como factor de cambio en nuestro país.

A pesar de que jamás dejamos de trabajar, hoy más que nunca me siento feliz de poder decirles que hemos vuelto.

Es un privilegio trabajar junto a todas y todos ustedes.

“Por mi raza hablará el espíritu”

Dra. María del Coro Arizmendi Arriaga